Ramón Daniel Contreras Barragán.
Lunes, 2 de enero de 2012
Se le eligió como presidente y pretende ser un cacique
Se le aprobó una constitución a su medida y la viola constantemente
Se le dio un mandato para que gobernara y lo que ha hecho es
desgobernar.
No ha desarrollado la economía, por el contrario la ha derrumbado
totalmente.
No resuelve los problemas de los venezolanos, pero si le envía
enormes cantidades de dinero a Fidel para que disfrute junto a sus secuaces.
Nuestros compatriotas se mueren de mengua y él malgasta millones
sobre millones en lujo como aviones, trajes, prendas, joyas y alimentos
y bebidas para el y sus cortesanos.
Se encadena constantemente abusando del poder, para decir mentiras
y más mentiras.
Irrespeta la descentralización, sin tomar en cuenta a mandatarios
regionales y locales elegidos y tan o más legítimos que él,
impidiéndoles desarrollar sus labores.
Destruyó a las Fuerzas Armadas Nacionales, convirtiéndolas en un
cuerpo miliciano al servicio de una tiranía y no del pueblo venezolano.
Destruyó la gallina de los huevos de oro (PDVSA), ocupándola con
incondicionales politiqueros y eliminando la tradición profesional que
se había establecido en la industria.
Cercó financieramente a las Universidades Públicas y sigue
mintiéndole reiteradamente al país, esta vez con la creación de la tan
cacareada Univercidad Bolivariana, mamotreto que difícilmente podrá
arrancar, debido a la improvisación.
Destruye diariamente miles de puestos de trabajo y sigue trayendo
extranjeros sin calificación alguna para desplazar a nuestros compatriotas.
Arma pandillas de malandros, con el fin de atacar a los que no
estemos con la ROBOLUCION.
Criticó las llamadas cúpulas podridas y se convirtió en el mejor
ejemplo de las mismas.
Vociferó en contra de la corrupción y los corruptos y en su
desgobierno crecieron exponencialmente estos graves problemas.
Promueve de manera criminal la separación de la familia venezolana,
tan unida tradicionalmente.
Pretende llevarnos al desastre total al querer establecer un
régimen castro-comunistoide.
Crea misiones a diestra y siniestra, sin planificación alguna y con
fines electoreros, sin importarle para nada verdaderos resultados a
favor del mejoramiento de los menos favorecidos.
Por todas estas razones y otras más que el lector puede agregar, este
señor no debe continuar al frente de los destinos de Venezuela, si
queremos conservar nuestra identidad nacional.
No permitamos que terminen de destruir nuestro país, rescindámosle el
mandato que se le otorgó.
DIGÁMOSLE SÍ A UN NUEVO GOBIERNO CONCILIATORIO Y RECUPERATORIO DE
NUESTRO AÑORADO PAIS.
C. I. Nº V- 1.904.851
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