Juan Fernández
Martes, 29 de noviembre de 2011
Si hacemos una sumatoria con los datos anteriores una estimación
conservadora de la deuda de PDVSA llega a los 90 mil millones de
dólares. Si además, consideramos las limitaciones cada día mayores en
su capacidad de producción, los compromisos políticos de suministro por
400 mil bbl/día los cuales son cuentas incobrables
La critica situación de PDVSA por el mal manejo gerencial y por ende de
sus finanzas, la podemos comparar como si tuviésemos un amigo cuyo
comportamiento es gastar más de lo que gana y encima para tapar el hueco
de sus finanzas se sigue endeudando para cubrir la falta de dinero para
cumplir sus obligaciones, y sigue y sigue endeudándose. Sin duda al
amigo le llegara el momento de parar pues sus deudas, lo llevaran a la
insolvencia y a la quiebra.
PDVSA tiene una deuda financiera en libros que ya supera los 25 mil
millones de dólares. Sin embargo ese monto no refleja la totalidad de
las deudas de PDVSA. Haciendo un ejercicio con los datos disponibles,
vemos como por un artificio de ingeniería financiera los Fondos Chinos
son contabilizados como ventas cobradas por anticipado, es decir no se
muestran como deuda, y obliga a la entrega a futuro de petróleo cuyo
volumen hoy en día supera los 400.000 bbl/día y llegara a un millón, el
monto de estas"ventas cobradas por anticipado" es del orden de los 30
mil millones de dólares. Por otro lado, la deuda comercial con sus
proveedores se mantiene alta, algunos expertos estiman un monto de 8 mil
millones dólares. A lo anterior el gobierno anuncia un nuevo
endeudamiento con los chinos por el orden de 6.5 mil millones de
dólares, para proyectos de refinación y de producción de crudo extra
pesado de la faja del Orinoco. Como PDVSA no tiene flujo de caja
disponible, la empresa emitirá bonos por el orden de 2.4 mil millones de
dólares para poder pagar al BCV parte de la deuda con la institución
cuyo monto se estima 13.5 mil millones de dólares.
No debemos olvidar en este lamentable cuadro financiero de PDVSA los
juicios por arbitraje en especial Exxon-Mobil, Conoco-Phillips y otras
empresas , cuyo montos en reclamo también son pasivos contingentes a ser
pagados, compensaciones que pueden llegar a los 30 mil millones de
dólares los cuales influyen aun más negativamente en las posibilidades
de la industria petrolera venezolana.
Si hacemos una sumatoria con los datos anteriores una estimación
conservadora de la deuda de PDVSA llega a los 90 mil millones de
dólares. Si además, consideramos las limitaciones cada día mayores en su
capacidad de producción, los compromisos políticos de suministro por 400
mil bbl/día los cuales son cuentas incobrables. El escenario de una
continuación de PDVSA gerenciada de esta forma hace fácilmente prever
una profundización de la crisis en la empresa y al ritmo que lleva el
gobierno como en las economías comunistas vamos camino a tener una
empresa petrolera de chatarra y en manos de acreedores como los Chinos.
Por cierto, el esquema Chino de financiamiento a Venezuela es con todas
las garantías a diferencia de cómo vienen invirtiendo en otros países en
el sector petróleo como es el caso de Brasil.
Por último el Ministro Giordani, uno de los arquitectos del
endeudamiento con los Chinos ha dicho que; "Venezuela le dará a China
todo el Petróleo que necesite". Lo cual ya es un hecho, en la actualidad
le estamos "dando" petróleo a China y este país dispone del mismo a su
mejor conveniencia aun afectando nuestros mercados naturales.
La disponibilidad de continuar suministrando petróleo al mercado depende
si PDVSA vuelve al núcleo del negocio, creando riqueza, maximizando la
renta petrolera, para ser la palanca del desarrollo sostenible. Es una
responsabilidad de todos los venezolanos no permitir que un grupete
gobernante destruya esta posibilidad la cual nos pertenece a todos.
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