La verdadera soberanía monetaria
José Luis Cordeiro
Martes, 1 de mayo de 2012
La soberanía monetaria debe ser de los ciudadanos y no de los políticos
¿Prefiere usted ganar en bolívares o en dólares?
¡A mí mejor que me paguen en dólares!
Señora entrevistada en la calle.
La verdadera soberanía debe residir en los ciudadanos y no en los
políticos. El caso de la política monetaria es uno de los mejores
ejemplos. Los políticos continuamente hablan de la importancia de la
soberanía monetaria para controlar "la" moneda y manejar "la" economía.
Aquí habría que preguntar: ¿qué moneda y qué economía? La respuesta es
clara: la moneda y la economía de los propios políticos, quienes viven
de imprimir dinero y utilizarlo para sus propios fines. Por eso es que
los políticos prefieren tener monedas con nombres y símbolos patrióticos
para poder engañar demagógicamente al pueblo. Sin embargo, si se le
pregunta directamente a los ciudadanos, la gente prefiere una moneda
fuerte como el dólar y no una débil como el bolívar.
Muchos economistas también tienen gran parte de la culpa sobre la
deterioración de la política monetaria, pues ellos han creado los
términos del debate que utiliza el público en general. Para el azúcar o
los zapatos, los economistas se han enfocado principalmente en el
beneficio de los consumidores. Los economistas han estudiado lo que los
consumidores desean y cómo el sistema de mercado puede lograr la mejor y
la mayor oferta. La preferencia de los economistas por el libre comercio
y la competencia se debe al énfasis en el bienestar del consumidor.
Consumidores
En la política monetaria, sin embargo, la mayoría de los economistas se
han enfocado en el bienestar del productor: el Gobierno. En lugar de
preguntar qué quieren los consumidores, los economistas se han orientado
en ver qué desea el Gobierno. Han tratado la economía, a través de la
política monetaria, como algo para ser manejado en beneficio del
Ejecutivo (el productor de dinero) y no en beneficio de los ciudadanos
(los consumidores de dinero). Por eso muchos economistas han promovido
el monopolio y las restricciones monetarias, los controles cambiarios,
los privilegios legales exclusivos para la moneda local y los sistemas
de bancos centrales estatales.
Hay que cambiar el pensamiento sobre la política monetaria: lo
importante es el bienestar del consumidor y no del productor de dinero.
La soberanía monetaria debe ser de los ciudadanos y no de los políticos.
Ningún país se beneficia con inflación alta y tasas de interés elevadas;
la experiencia venezolana muestra que los perjudicados son los
ciudadanos, es decir, los consumidores de dinero producido por gobiernos
irresponsables.
http://www.analitica.com/va/economia/opinion/2415221.asp
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