26-07-2011.
Dr Sinué Escolarte
(www.miscelaneasdecuba.net).- El anuncio de que el presidente Hugo
Chavez padece una grave enfermedad, ocupa los titulares de los medios de
comunicacioón en todo el mundo, provocando, debido al secretismo e
intriga del estado VeneCuba, innumerable opiniones y especulaciones,
para conseguir el primero de sus objetivos. Desviar la atención
internacional y nacional de su maltrecho desgobierno.
Muchas de las apreciaciones provenientes de médicos bien calificados,
parecen aproximarse a la oscura realidad. Sin embargo, los pensamientos
diagnósticos se han basado en datos procedente de los voceros
oficialistas y el propio presidente, el mismo que viene demostrando
desde su llegada al poder, ser un perfecto mentiroso.
Más de una falsedad se han comprobado en el curso de las informaciones.
Suficientes para dudar.
Me permito entonces utilizar mi experiencia clínica y criterio médico
personal, apoyado en la observación colegiada, para sumarme al por
ciento de galenos que han opinado, intentando, sobrepasar el manejo
orquestado por el dictador y sus secuaces.
La primera intención de Chavez, su cúpula y cómplices, salta a la vista.
La manipulación de los manipulables, la mayoría. Enfermo o no, ya este
aspecto lo alcanzó al crear una sensación de pena favorable por tan
sorpresiva y fatal enfermedad, en sus sugestionables seguidores y en
algunos que no lo son tanto.
Pero analicemos.
Sometido a continuas situaciones de tensión confrontacional desde el
comienzo en su cargo, quien compara la figura atlética de los inicios
cuando prometió libertad y democracia para captar ingenuos y
confundidos, hasta el momento en que comenzó a dar órdenes de reprimir y
anular opositores, de expropiaciones, nacionalización de propiedades, y
cierre de medios de comunicación, se nota marcadamente inflada su imagen
corporal y desinflada en significado conceptual humano.
Da la impresión de haber aumentado libras con la ingestión del mal,
mal-nutriéndose por exceso, a pesar de mantenerse presionado por
horarios desajustados de sueño, alimentación, vigilia, descanso,
buscando la concentración del poder, el mando centralizado y el control
único, recargando sobremanera el trabajo físico y mental hasta niveles
peligrosos. Esto requiere una vigilancia y atención medica regular,
constante, especializada, obligada, como dictan las normas para su
posición con más razón, asesorado por su papá que las tiene siempre al pie.
Por otro lado el cancer totalmente silencioso u oculto es menos
probable. Con síntomas atípicos, disminuidos, o aislados y
manifestaciones paraneoplásicas que pueden ser detectados, es factible.
Un cancer accesado agudiza los síntomas y cuando alcanza un gran tamaño
(según sus palabras como una pelota de base ball), aparece un síndrome
general caracterizado por decaimiento, pérdida del apetito, pérdida de
peso, casi siempre unido a un estado febril crónico, signos que nunca se
han visto en el "enfermo dictador". Permanecer sentado por mucho tiempo
como hace en sus prolongados programas de televisión, con un bulto de
ese tamaño en la pelvis y la presión de su prominente abdomen, es
imposible. El tiempo que se demora en crecer de manera silente el tumor
facilita su diseminación. Las investigaciones rutinarias periódicas que
en este tipo de personaje se realizan, deben alterarse, al menos, la
fórmula leucocitaria en sangre (leucocitosis), como ocurre en toda
infección crónica y la velocidad de sedimentación globular, que se
acelera tanto en el cancer como en la sepsis. La anemia es elemento
frecuente en este tipo de patología. El estado anímico varía aun sin
quererlo, hasta que se pueda sobreponer a la sorpresa.
Este probable comportamiento se aleja de la aparición repentina, de una
urgencia casual en Cuba, que posteriormente se transformó, en una
entidad de cuidado y gravedad, de conducta lenta.
La visible obesidad alcanzada por el presidente, más de 230 lbs (104,5
kgs), se distancia mucho del peso ideal. Tendría que medir, dos metros o
más para corresponderse, y si, justifica un índice de masa elevado
(parámetro para medir el sobre peso), con más de 100 centímetros de
circunferencia abdominal, perdida de la relación cadera cintura y 56
años de edad, todos factores de riesgo. En estas circunstancias se
anuncia el grave proceso. Esto va en contra del cuadro letal anunciado
que incluye un deterioro progresivo que se incrementa con la
terapéutica. Hasta el momento, nadie con cancer engorda.
Mucho más probable es que portara un síndrome plurimetabólico, o
síndrome X, que incluye además, hipertensión arterial, frecuente en
mestizos y negros, diabetes o intolerancia a la glucosa, coincidente con
los gordos, e incremento del colesterol y los trigliceridos en sangre,
típico de obesos y diabéticos, elevándole al doble de lo normal, la
mortalidad por Enfermedad Cerebro Vascular e Infarto Agudo del Miocardio.
De seguir ganado Kgs, le sería imposible continuar su labor destructiva
en su país con gran influencia negativa en la realidad cubana, por
motivos débiles. Aparecerían: falta de aire, dolores articulares,
cansancio fácil, apnea del sueño, etc, seguro, presentes en el
mandatario, e impedimento importante para llevar adelante su campaña
electoral.
Había que detener esto y el mejor momento era en el que su popularidad
descendía por debajo del 50%, por ineficiencia y abandono contra la
pobreza, falta de viviendas y artículos de primera necesidad, inflación
tan elevada, desempleo en aumento, inseguridad nacional, corrupción
generalizada y descontento progresivo, estando próximo a las elecciones.
De ahí que se decide ingresarlo alejándolo del escenario contaminado,
por razones emocionales, "contra su voluntad", reposando del estrés,
escapando de la espera, exigencias del pueblo, e insolución de los
problemas.
Se le impone una dieta estricta bajo vigilancia metabólica para
controlar los parámetros alterados y, baja 14 Kgs cambiándole el aspecto
físico que juega algo con ayuda de la sugestión, con la neoplasia
anunciada provocando compasión. Se estabiliza la TA y se anuncia con
cualquier pretexto quirúrgico mínimo, una enfermedad mortal de la cual
emergerá victorioso, invencible, triunfador sobre el destino y el
malintencionado enemigo burgués. Aumenta su popularidad.
La astucia del Hombre Más Bueno Del Mundo radicado en Cuba, para estos
menesteres, es vital. Su capacidad para fabricar tragedias y salir
airoso es incuestionable. Apelar a los sentimientos humanos para quedar
fortalecido en tiempos de tormenta política, es su especialidad.
Si unimos las mentiras tenemos:
Diagnóstico anatomopatológico del padecimiento, oculto.
Operación realizada en un lugar no visible ni aclarado de su cuerpo.
Coincidencia de que ocurra en Cuba, su principal aliado político, donde
puede implementar y mantener la mentira protegida.
Evasiva para ser tratado en su país o en Brasil sin explicación ni
ventajas, lugares donde saldría a la luz la verdad.
Comportamiento enérgico todo el tiempo, con variaciones mínimas de su
agresivo discurso.
Estado físico y mental casi perfecto luego de una semana con quimioterapia.
Regreso sorpresivo a Venezuela, al día siguiente de concluida la primera
etapa del tratamiento, con buen color y fáciles movimientos, sin
secuelas terapéuticas, listo para arengar.
Su anuncio de que no hay células cancerosas metastáticas, algo que nadie
conoce, para no prolongar mucho el mal, creando desánimo por él y volver
pronto a la carga.
Pronunciamiento, más seguro de que vencerá la cruel enfermedad.
Con este teatro, los hermanos Castro, ocupan posiciones de cierta bondad
ante los venezolanos y el mundo, protegiendo la presencia militar en ese
territorio, demostrando, que la potencia médica cubana es igual o
superior a la de Venezuela y Brasil y, el comandante Chávez, justificará
en parte la mano suelta con la que regala 5,000 millones de petrodólares
anuales a Fidel.
Nada se parece más a una bien organizada farsa.
http://www.miscelaneasdecuba.net/web/article.asp?artID=33073
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