La deuda en el ciclo que creó la crisis de los 80
En medio de un boom petrolero las cuentas por pagar crecen velozmente
VÍCTOR SALMERÓN | EL UNIVERSAL
lunes 18 de julio de 2011 01:40 AM
Entre 1974-1977 y 1979-1981 el precio del petróleo experimentó una
escalada histórica que multiplicó el ingreso de Venezuela, pero los
gobiernos de Carlos Andrés Pérez y Luis Herrera Campíns diseñaron planes
de gasto de tal magnitud que también la deuda creció a pasos agigantados
y su peso en relación al PIB se quintuplicó.
Al caer los precios del petróleo la banca internacional cerró el grifo
del financiamiento y el país cayó en una crisis que disparó la pobreza.
Arturo Uslar Pietri, en un artículo dedicado al tema, resumía que
"Venezuela es un caso extremo, un pequeño país que recibe un desmedido
flujo de dólares provenientes de la actividad petrolera y no solamente
los gasta sino que incurre en la locura de endeudarse".
A partir de 2004 el destino vuelve a sonreír y Venezuela disfruta un
prolongado boom petrolero donde el precio del barril logra superar los
100 dólares y en los últimos siete años la administración de Hugo Chávez
ha recibido la fortuna de 407 mil 272 millones de dólares, pero al igual
que en el pasado, la deuda crece rápidamente.
El viernes de la semana pasada Jorge Giordani, ministro de Finanzas,
afirmó que en este momento la deuda pública sólo representa 18% del PIB,
magnitud bastante cómoda, pero la realidad es que su cálculo no incluye
todas las cuentas por pagar porque no suma los préstamos tramitados con
China que se encuentran en el balance del Bandes.
Alejandro Grisanti, analista de Barclays Capital, explica que al incluir
toda la carga y utilizar un tipo de cambio promedio, que toma en cuenta
al Sitme y el mercado negro, la deuda venezolana cerró en 43% del PIB en
2010 y aumentará hasta 47% este año.
La historia de Venezuela demuestra que al desmontar los controles el
tipo de cambio se sitúa en el nivel que marca el mercado negro, por lo
tanto, vale la pena preguntarse que pasaría entonces con la deuda.
Alejandro Grisanti precisa que si se utiliza el tipo de cambio del
mercado negro la deuda venezolana cerraría este año en 76% del PIB un
nivel que ya podría catalogarse de muy preocupante.
Pero dejando a un lado lo que ocurriría en un hipotético escenario donde
el país quisiera cambiar de política económica los análisis sobre la
deuda coinciden en que lo alarmante aun no es el monto sino la velocidad
con la que está creciendo a pesar de los altos ingresos petroleros.
Basta observar que de acuerdo con el Banco Central la deuda en divisas
aumenta 161% en cinco años, desde 29 mil 610 millones de dólares hasta
77 mil 495 millones en el primer trimestre de 2011 y la total,
incluyendo la interna, se ubica en 126 mil millones de dólares.
Algunas variaciones
Si bien la tendencia es similar a la de los años 70, es decir,
endeudamiento veloz a pesar del alto ingreso petrolero, existen
diferencias importantes.
En los gobiernos de Pérez y Herrera los institutos autónomos se
endeudaron de forma importante aumentando las facturas a cancelar,
ahora, no está presente esta situación, pero existen otros elementos a
considerar.
Durante la administración de Hugo Chávez Pdvsa, a diferencia del pasado,
se está endeudando a un ritmo acelerado sin que aumente su capacidad de
producción.
En el primer trimestre de este año el PIB petrolero es 27% menos que en
1998 mientras que Pdvsa, de no deber nada, tiene compromisos por el
orden de 29 mil millones de dólares.
En parte el endeudamiento ha sido para aumentar la presencia del Estado
en la economía, estatizando empresas, creando fábricas, asumiendo el
control de áreas estratégicas pero el país ha aumentado la dependencia
en el petróleo y tiene déficit de inversión en sectores fundamentales.
Al cierre de 2010 las exportaciones no petroleras son menores a las
registradas en 1999 y la falta de inversión ha derivado en racionamiento
eléctrico, fallas en el servicio del Metro de Caracas y deterioro
importante de la vialidad.
José Guerra, director de la escuela de economía de la Universidad
Central de Venezuela, explica que "la deuda de los años 70
principalmente se utilizó para invertir donde el sector privado, por los
montos, no podía hacerlo como en la Corporación Venezolana de Guayana
(CVG), ahora se trata de un contexto donde el Estado busca desplazar al
sector privado, adueñarse de los medios de producción".
Agrega que en este momento "parte de la deuda ha sido para comprar
empresas como el Banco de Venezuela y La Electricidad de Caracas que ya
existían, no para crear nuevas empresas".
Tasas altas
Otro tema relevante es que a pesar de los altos precios del petróleo,
que se traducen en capacidad de pago, el clima político y la constante
emisión de bonos han hecho que el país comience a pagar tasas de interés
muy elevadas para obtener financiamiento.
En febrero de este año Pdvsa y Finanzas vendieron bonos por un total de
6 mil millones de dólares y hasta el vencimiento en 2022, los
compradores recibirán cada año 765 millones de dólares en intereses, el
mayor beneficio por emisión alguna en el planeta.
En esta transacción la República se comprometió a pagar una elevada tasa
de interés de 12,75% que creó un precedente para las próximas emisiones
de bonos públicos.
El país no ha creado un mecanismo para ahorrar parte del ingreso
petrolero para los tiempos en que el barril pierda brillo, sino
estructuras para gastar con mayor discrecionalidad como el Fonden.
Alejandro Grisanti recuerda una lección de los 70: "está claro que el
mercado te presta cuando el precio del petróleo es alto y te cobra
cuando cae".
http://economia.eluniversal.com/2011/07/18/la-deuda-en-el-ciclo-que-creo-la-crisis-de-los-80.shtml
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