Friday, April 8, 2016

La Habana y Caracas urdieron una trama en paraísos fiscales para amparar el negocio millonario de pasaportes venezolanos

La Habana y Caracas urdieron una trama en paraísos fiscales para amparar
el negocio millonario de pasaportes venezolanos
DDC | Madrid | 5 Abr 2016 - 6:04 pm.

El régimen de La Habana y el Gobierno de Venezuela urdieron una
estructura de sociedades opaca mediante varios paraísos fiscales para
amparar el negocio millonario de pasaportes venezolanos que mantienen
ambos gobiernos socialistas desde hace años.

En una publicación conjunta entre el portal venezolano Armando.info y el
peruano IDL Reporteros, en el marco de la filtración de "Los papeles de
Panamá", se aportan las evidencias que muestran que los documentos de
identidad venezolanos en realidad fueron diseñados en Alemania y que La
Habana y Caracas crearon una trama societaria para que el dinero
vinculado a este negocio circulara.

Según la investigación, la intermediación de La Habana dejó una estela
de transferencias y comisiones que transitaron al menos por cuatro
países. En esa operación, el banquero peruano Francisco Pardo fue un
personaje clave.

Las informaciones apuntan que Pardo está detrás del entramado de
empresas que permitieron al Gobierno cubano proveer los pasaportes de la
Venezuela de Hugo Chávez.

Los documentos guardados —y ahora filtrados— en el bufete de Panamá
Mossack Fonseca señalan al banquero peruano como el verdadero
beneficiario de Billingsley Global Corp y otras de las empresas
offshore, que sirvieron de vehículo para que La Habana revendiera a
Caracas la tecnología de los pasaportes bolivarianos.

Pero en realidad, las láminas de policarbonato de los documentos de
identidad salieron de Alemania, de la empresa Bundesdruckerei. "La razón
fundamental del por qué esta compañía no quiere venderle directamente a
Cuba y Venezuela, es justo por el tema reputacional. Temen que la
competencia haga propaganda adversa por el tema de ventas a gobiernos
totalitarios".

Eso advirtió en una correspondencia interna de hace más de ocho años —el
26 de noviembre de 2007— el abogado Ramsés Owens, uno de los más altos
ejecutivos del bufete en aquel entonces. "Menos mal que para nosotros en
Panamá no hay nada que nos inhiba", aseguraba en el mismo correo.

Pardo Mesones terminó arreglando en Caracas una triangulación de
transferencias y contratos a través de paraísos fiscales.

Con los contratos firmados junto a Cuba y Venezuela, la recién creada
empresa Billingsley Gobal Corp se aseguró al menos 64 millones de euros:
40 millones debían llegar a Alemania y los otros 24 se quedarían con
Pardo en Panamá, según advirtió Owens en otro correo dirigido a Sascha
Haust del banco alemán Dresdner Bank AG.

Según la investigación periodística, no fue fácil encontrar bancos
internacionales que aceptaran como garantías las cartas de crédito del
Banco Financiero Internacional de Cuba, sobre el que pesa el embargo
económico de Estados Unidos.

En Panamá, Credicorp y Multibank abrieron las primeras cuentas para
Billingsley. Lo más difícil fue dar con otros actores que acompañaran
las operaciones en Europa, para terminar de triangular el periplo de
unas transferencias que salieron de Venezuela con destino a Alemania.

De acuerdo con el informe periodístico, los pasaportes venezolanos se
han expedido de esa forma a la sombra de un absoluto hermetismo. La
negociación —hasta ahora guardada en secreto— establece cláusulas
expresas de confidencialidad en todos los contratos. Incluso en las
siguientes fases, como se lee en el "Contrato I10-084-000/2010 para la
ampliación del sistema de personalización de pasaportes y cédulas
electrónicas para la República Bolivariana de Venezuela".

El Gobierno cubano, además, se reservó el acceso al software a través de
Albet Ingeniería y Sistemas, la filial que el régimen de los Castro
diseñó exclusivamente para esta tarea. "Albet adquirirá un derecho de
uso perpetuo, no exclusivo e intransferible a través del software
entregado junto con el sistema", establece el documento.

Esta cuestión había sido advertida por el ingeniero en computación
Anthony Daquin que —tras denunciar el caso— pasó de ser asesor del
Ministerio de Interior y Justicia en Venezuela a asilado en Estados Unidos.

"Los cubanos manejan el software y marcan las directrices de seguridad".
Eso declaró a la periodista Adriana Rivera en la edición del 20 de julio
de 2011 del diario El Nacional, en un reportaje que por primera vez dio
noticias sobre la mano de Cuba en el sistema de identificación venezolano.

"Los originales de los códigos fuente (los que describen el
funcionamiento del software y permiten introducirle cambios) de las
aplicaciones informáticas desarrolladas serán conservadas por la parte
cubana mientras permanezca vigente el período de soporte técnico", dijo
entonces, y hoy agrega desde Estados Unidos que nada ha cambiado: "Esta
gente tiene la capacidad de hacer un pasaporte venezolano en Cuba y a la
vez sembrar esos datos en el sistema".

Para Daquin, no es casual que Caracas se haya convertido en una de las
ciudades más peligrosas del mundo justo cuando el Estado venezolano
interconectó el registro civil con información tributaria y mercantil.
"¡El crimen organizado está usando el sistema para secuestrar!", declara
el experto.

Source: La Habana y Caracas urdieron una trama en paraísos fiscales para
amparar el negocio millonario de pasaportes venezolanos | Diario de Cuba
- http://www.diariodecuba.com/cuba/1459875873_21462.html

No comments:

Post a Comment