Elecciones serán prueba de fuego para el autoritarismo venezolano
ANTONIO MARÍA DELGADO
adelgado@elnuevoherald.com
La represión ha aumentado en Venezuela bajo el gobierno de Nicolás
Maduro y el régimen hace mucho que dejó ser una democracia, pero el
chavismo incursionaría formalmente en el terreno de las dictaduras si se
roba o si suspende las elecciones parlamentarias de diciembre, dijeron
expertos.
"Si el gobierno fuese a suspender la elección [como algunos temen], o si
prohíbe a la oposición que compita, o si descalifica a tantos candidatos
que la oposición no pudiese competir seriamente, entonces allí sí
estaría cruzando la línea", comentó el profesor de Harvard, Steven Levitsky.
"Es una raya que ningún régimen ha cruzado en décadas en América Latina,
y que le llevaría a perder toda la legitimidad que le queda", señaló
Levitsky desde Lima.
Por el momento, Venezuela sigue firmemente plantada dentro de lo que los
académicos denominan un "autoritarismo competitivo", término acuñado por
el propio Levitsky en su libro del mismo nombre y que es utilizado para
describir a regímenes no democráticos en los que la oposición aún puede
competir por el poder en elecciones, aunque frecuentemente bajo
condiciones muy injustas o muy desiguales.
Pero el régimen bajo la conducción de Maduro se ha vuelto mucho más
autoritario que el de su predecesor, el fallecido presidente Hugo
Chávez, llegando hasta el extremo que lo único que lo diferencia de una
dictadura es que realiza elecciones.
"Venezuela ha pasado a ser el segundo país menos democrático en todo el
hemisferio. Solo es superado por la dictadura cubana", dijo Mark P.
Jones, profesor de Ciencias Políticas, especializado en América Latina,
en Rice University en Houston.
"Lo que hemos estado viendo en Venezuela es un descenso generalizado en
los últimos tiempos. Comenzó con Chávez, pero se volvió mucho más severo
al final de Chávez y empeoró bajo Maduro", añadió Jones, cuyas
investigaciones le llevan a monitorear constantemente la salud de las
democracias latinoamericanas.
Jones coincidió en que el tema electoral mantiene a Venezuela fuera de
la definición formal de las dictaduras.
"Pero analizando la situación con base en el funcionamiento de las
instituciones, Venezuela dejó de ser una democracia hace ya mucho
tiempo", sostuvo al advertir la inexistencia de la separación de
poderes, el uso de la justicia como instrumento de persecución política
y las amenazas a las libertades civiles.
En estas áreas, Venezuela ya se comporta como una dictadura y muestra
grados de opresión y de persecución política comparables a las de
algunas dictaduras latinoamericanas a finales de los años setenta e
inicios de los ochenta, dijo Jones.
Maduro también ha dado rienda suelta a una ola represiva que ha golpeado
muy duro la imagen de su régimen ante la comunidad internacional, en
medio de denuncias de ejecuciones extrajudiciales, arrestos y torturas
de personas que se han atrevido a protestar contra el régimen.
Levitsky dijo que esto se debe más a la desesperación del régimen ante
un clima de gran inestabilidad que a un verdadero deseo de tornarse más
autoritario.
"La opresión esta empeorando porque el gobierno se siente amenazado y
sabe que está debilitando, y con el tiempo se torna cada vez más
desesperado. El gobierno está acorralado en una situación muy difícil,
sin que parezca tener algún tipo de salida", señaló.
Carlos Ponce, director del Programa para America Latina de Freedom
House, dijo que las investigaciones de la ONG coinciden con las
conclusiones de los académicos.
"Precisamente porque hay elecciones, es que Freedom House todavía
considera que Venezuela está en la rayita de lo que es un país libre",
señaló Ponce antes de añadir que en el último informe sobre la Libertad
en el Mundo, la organización colocó al país sudamericano a dos puntos de
ingresar a la categoría de "No Libre".
"Pero eso fue solamente por el hecho de que se organizan elecciones
medianamente competitivas en Venezuela, a diferencia de países como Cuba
y Corea del Norte o Zimbawe", explicó.
Aunque eso no quiere decir que los comicios en Venezuela sean modelos de
elecciones justas, libres y transparentes.
"En el caso de la realización de procesos electorales, Venezuela está
justo en la raya. No ha caído aún en un esquema en el que las elecciones
son totalmente fraudulentas, pero está acercándose cada vez más a ese
límite", comentó Jones, al explicar la desigualdad de condiciones bajo
los que compite la oposición, la negativa del régimen de permitir la
participación de observadores internacionales, las modificaciones a los
circuitos electorales para favorecer al oficialismo y las
inhabilitaciones de algunos de los rivales más populares.
Pero el régimen no tiene un cheque en blanco para seguir en esta tendencia.
A diferencia de procesos anteriores, las elecciones parlamentarias del 6
de diciembre serán monitoreadas con mucho detenimiento por la comunidad
internacional, que ya comienza a mostrar preocupación por el deterioro
de las condiciones políticas y económicas de Venezuela, agregó Frank
Mora, director del Centro de America Latina y el Caribe de la
Universidad Internacional de la Florida (FIU).
"Estamos llegando a un momento importante. Estas elecciones no van a ser
iguales que las últimas elecciones", comentó Mora.
"La comunidad internacional está reaccionando ahora más de lo que hacía
hace unos años atrás. No creo que haya la misma paciencia con el
deterioro del sistema democrático en Venezuela y sí hay un robo, o
aberraciones en las elecciones, yo creo que va a haber una reacción de
la comunidad internacional", enfatizó.
Siga a Antonio María Delgado en Twitter:@DelgadoAntonioM
Source: Elecciones serán prueba de fuego para el autoritarismo
venezolano | El Nuevo Herald -
http://www.elnuevoherald.com/noticias/mundo/america-latina/venezuela-es/article29034400.html
No comments:
Post a Comment