El precio concedido no logra ajustarse al proceso de transformación. El
aumento de 20,4% es insuficiente para cubrir los costos operativos del
sector procesador. El alza reciente de la materia prima para la harina
precocida impactó notablemente a los industriales
LUISA BENAVIDES
A pesar de que el Gobierno nacional insistió en los últimos meses en no
conceder algún aumento a los alimentos de la canasta básica hasta que no
entre en vigencia la Ley de Costos y Precios Justos, el alza en los
costos de las materias primas tanto en el mercado nacional como
internacional ha llevado a los distintos ministerios a conceder los tan
solicitados aumentos, aunque no en la proporción que requieren los
circuitos productores y procesadores.
A finales de la semana pasada, se publicó en la Gaceta Oficial Nº 39.748
el alza de la harina de maíz precocida de 3,37 bolívares a 4,06 lo que
representa un incremento de 20,47%. El gremio procesador, agrupado en la
Asociación Venezolana de Industriales de Harina Maíz (Venmaíz), había
detallado hace más de un mes que existía un brecha entre los costos de
producción y el precio establecido de alrededor de 40%, por lo que el
último ajuste aún no termina de cubrir las operaciones de la industria.
Además si se toma en cuenta que a partir del 15 de agosto entró en
vigencia el nuevo precio del maíz blanco a nivel productor, dirigido
principalmente al sector procesador de harina precocida, el cual fue
aumentado en 30%, el ajuste de 20,47% en el producto final sigue estando
por debajo del encarecimiento de la materia prima y otros aspectos como
el pago de mano de obra y empaquetamiento del producto. La industria
estaba esperando un ajuste del 57%.
ARROZ TAMBIÉN SE ENCARECE
El viernes también se modificaron los precios de los distintos tipos de
arroz para el consumo. La resolución conjunta de los ministerios de
Alimentación, Agricultura y Tierras, Comercio, Ciencia, Tecnología e
Industrias Intermedias y de Planificación y Finanzas detalló que el
arroz blanco de mesa tipo I ahora tendrá un valor de 5,62 bolívares por
kilo; el tipo II quedó fijado en 5,23 mientras que el kilo del arroz
tipo III ahora será vendido en 4,96 bolívares.
Estos incrementos representan un incremento de 26% con respecto a sus
precios anteriores fijados en noviembre de 2010.
Al igual que al sector procesador de harina precocida, a la industria
arrocera también se le incrementó la materia prima a mediados de agosto
cuando se publicó que el arroz paddy sería pagado a 2,02 bolívares por
kilo. Anteriormente al productor se le pagaba 1,55 bolívares.
Antes del reciente ajuste, el rezago de la agroindustria se ubicaba en 56%.
Uno de los principales problemas que actualmente enfrenta el sector
procesador industrial es la baja producción del grano en el campo.
Recientemente la Federación Venezolana de Arroz alertó que el país
requiere de 250 mil toneladas de arroz en cáscara importado para cubrir
el consumo interno.
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