Friday, September 23, 2011

"Con mis derechos, no"

La Nación | 23/09/2011

"Con mis derechos, no"

Leopoldo López asegura que conquistó sus derechos y no los va a
entregar. El TSJ permanece calladito sobre su habilitación, aunque el
resto del Estado le echó el muerto. No considera otro escenario que
estar habilitado, aunque no revela qué hará si el CNE no lo deja
inscribirse. Quiere debatir cara a cara con los demás precandidatos a
las primarias, con respeto pero con contrastes
REDACCIÓN DE POLÍTICA

El fundador de Voluntad Popular, Leopoldo López, se califica como
"habilitado". Lo dice casi como si fuera su segundo apellido. Así llegó
a TalCual para defender su nuevo estatus legal y hablar de sus ganas de
ser Presidente de la República.

–El Gobierno dice que la última palabra la tiene el TSJ, ¿esperará esa
decisión?
–Si yo hago eso estoy legitimando un camino que no es el que corresponde
en derecho y justicia. El Estado venezolano participó con una delegación
de más de 25 abogados en la Corte. Si participó del proceso tiene que
participar de la decisión. La Constitución plantea que el Estado debe
acatar las decisiones emanadas por los entes internacionales en DDHH. No
hay espacio para la interpretación.

–El procurador Carlos Escarrá señala la potestad constitucional de
sancionar que tiene la Contraloría, asomando una contradicción.
–No hay conflicto. La Constitución dice que para quitarle los derechos
políticos a un ciudadano tiene que haber una sentencia penal
definitivamente firme. La decisión de la Corte restituye el orden
constitucional que fue violentado con las inhabilitaciones.

–El Gobierno habla de soberanía.
–Es que el derecho político es el derecho a elegirse, y eso es un
derecho humano. Los DDHH no tienen fronteras, están por encima de
cualquier gobierno y de cualquier estamento legal particular.

–Le han caído en cayapa desde todas las instituciones del Estado.
–La cayapa es la mejor expresión del miedo. Buscan el asesinato moral
impune. Pero nosotros tenemos concha de tortuga frente a los insultos.
Yo estoy convencido de que me acompaña la verdad. Si yo tuviera rabo de
paja no me hubiera acercado a la candela.

–¿Qué pasa al día siguiente de que el CNE le cierre la puerta?
–En este momento no te puedo hablar de ese supuesto. Estoy habilitado.

–¿Qué consecuencias traería que el Estado prohíba su inscripción?
–Ponerse al margen de la Constitución, del sistema interamericano, y eso
significa convertirse en un Estado forajido y aislado.

–Pero en la OEA, la iniciativa para una declaratoria así parte de alguno
de los países miembros. ¿Están preparados para tocar esas puertas?
–Estoy preparado para todos los escenarios. "Si yo no puedo defender mis
derechos, cómo le planteo a los venezolanos que puedo defender los de ellos.

–¿Tienen constancia de casos similares en otros países donde se pueda
aplicar la sentencia?
–Está el caso de Piedad Córdoba en Colombia. El de unos ex ministros de
Costa Rica. Ocurrieron inhabilitaciones masivas en el Perú de Fujimori.
En México intentaron inhabilitar por la vía del abuso del derecho a
López Obrador. El caso ha tomado relevancia continental, por lo que
significa políticamente y jurídicamente.

AL RUEDO
–¿Su lanzamiento de este sábado 24 pudiera generar confusión, siendo que
aún no está claro que el CNE lo admita?
–No creo. La situación es muy clara. Los derechos no se mendigan ni se
regalan, se lucha por ellos. Yo los conquiste y no los voy a entregar.

–Varios partidos ya han cuadrado con precandidatos. ¿Con quién cuenta
Leopoldo López, aparte de Voluntad Popular?
–Ha habido muchos encuentros, mucho diálogo y esto apenas está
comenzando. Hay que ver cómo se da la dinámica política.
Independientemente de esos apoyos y decisiones, la decisión está en
manos de millones de personas. Yo estimo que puedan llegar a votar 4
millones de personas en las primarias.

–En las últimas encuestas Leopoldo López nunca ha salido como primera
opción, ¿cree que eso cambie con la habilitación?
–Yo entré en la carrera hace 72 horas. Espero que eso cambie. Quiero
ganar las primarias y liderizar (sic) una gran alianza de la Unidad para
lograr una victoria ante quien espero sea el candidato en 2012 del
oficialismo, Hugo Chávez, con un apoyo popular de más de 60%.

–Mucho se ha dicho sobre relaciones ásperas con otros políticos y otros
partidos. ¿Las primarias le servirán para reencontrarse con ellos?
–Nuestras tesis políticas en un momento dado fueron fuente de
diferencias, si se quiere, pero hoy son los pilares más fuertes que unen
a la oposición, que son las primarias y la tarjeta única. Creo que el
tiempo ha dado la razón de que ese es el camino.

–¿Estaría dispuesto a participar en debates de precandidatos?
–Hay que ir a debate. Allí se verá la consistencia, los planteamientos,
las diferencias, pero con respeto, altura, hermandad y fraternidad,
porque aquí nadie sobra.

–¿Hablamos de un debate con podio y todo, cara a cara?
–Creo que debe haber un podio aquí y uno aquí y uno aquí. Debate con
preguntas sobre temas. Qué pensamos en inseguridad, en tema petrolero,
sobre las instituciones del Estado, sobre el tema económico. Es lo que
nos va a permitir salir a la conquista del futuro: poner a la gente a
soñar. No se trata solo de derrotar a Chávez sino de dibujar a los
venezolanos la Venezuela que está por venir.

–Un debate entre amigos puede ser aburrido si no muestra claramente los
contrastes.
–Eso se puede hacer con respeto y sin descalificarnos. Nosotros tenemos
que resguardar la unidad afectiva, no solamente la efectiva.

SU MEJOR VENEZUELA
Su propuesta agrupa tres ideas: paz, bienestar y progreso. López dice
que las tres esferas se materializan en seguridad, generación de empleo
y superación de la pobreza. "Tenemos cómo construir la Venezuela que
rompa esquemas, el recurso humano, el financiero y creo que vamos a
tener el recurso anímico. Venezuela tiene que montarse en el rebote del
milagro venezolano de sacar en 6 años el país adelante. Dirán que soy
idealista, pero de eso se trata llevar adelante los destinos de una nación".

–¿Su proyecto prevé descentralización de vías, puertos y aeropuertos?
–Sí. La descentralización tiene que darse en competencias y capacidades.
Una de las grandes tareas será generar mayor autonomía financiera para
los estados pero con una visión compartida.

–¿Seguirían existiendo comunas y consejos comunales?
–Hay que fortalecer los consejos comunales como articuladores de las
comunidades, y desprenderlos de su función partidista política. Hay que
aclarar las competencias en distintos niveles, porque en este momento
hay confusión.

–¿Y las comunas?
–No sé qué son, más allá de una idea. Eso no existe. Yo no las he visto
en tres años que llevo recorriendo el país.

–¿Deben volver las juntas parroquiales?
–Sí. Hay que ajustarlas a las realidades territoriales. Son instancias
que podrían combinarse con los consejos comunales.

–¿Vale la pena mantener las misiones y otros planes sociales?
–Hoy no se conoce la realidad de esos programas ni sus efectos. Lo que
hay que hacer es ponerle mucho peso a la calidad de los programas sociales.

–¿Rehabilitar barrios o construir ciudades?
–Uno escucha que hay que sacar barrios para crear urbanizaciones. No
estoy de acuerdo con esa escuela de pensamiento. Los sectores populares
hay que rehabilitarlos, asumiéndolo como una política pública. El camino
que decidió el gobierno recorrer, con la construcción de 2 millones de
viviendas, ha fracasado. El enfoque tiene que ser de hábitat.

–Un nuevo gobierno recibirá un país donde hay narcolistas y narcoavionetas.
–Ese tema está enmarcado en la disminución de la violencia y la
inseguridad. Hay que asumir que el narcotráfico es un problema en el
país. En seguridad ciudadana hay que desarrollar políticas públicas
desde el día uno: atender a jóvenes hombres de 15 a 25 años de sectores
populares, arroparlos con un Estado fuerte que les garantice educación,
trabajo, cultura, acompañamiento espiritual y adrenalina.

ELECCIÓN Y REELECCIÓN
–¿Se pueden enfrentar todos los retos en un solo período presidencial?
–No. Aquí hay que plantearse una visión de país a mediano plazo. De allí
la importancia de la Unidad y la alternabilidad.

–¿Leopoldo López se plantea gobernar más de un período?
–Hay que plantearse un período, porque eso garantizará la unidad. La
alternabilidad fue fundamental, como en España con el Pacto de La
Moncloa o la concertación chilena, donde se plantearon un proyecto a
largo plazo pero con alternabilidad entre ellos.

–Pero Felipe González en España gobernó durante cuatro períodos (14 años).
–Pero había elecciones. En Venezuela la reelección debe limitarse y
plantear un proyecto de sucesivos gobiernos con una misma dirección.
Aquí nadie puede creerse el salvador de la Patria.

–¿Firmaría un compromiso previo entre precandidatos de gobernar un sólo
período?
–Son temas que hay que discutir. Estaría dispuesto a firmarlo. 6 años no
es poco. Tenemos que aprender a trabajar en equipo con vocación de
alternabilidad. La única función dentro del Estado venezolano no es ser
Presidente.

http://talcualdigital.com/nota/visor.aspx?id=59026&tipo=AVA

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